Sin embargo, la única alternativa parece ser comprar ropa más cara, y eso no resulta sencillo para tantas familias (cada vez más) a las que les cuesta un mundo no ya llegar a fin de mes, sino llegar incluso a la semana siguiente. La marca de ropa noruega tiene una larga historia en el mundo del deporte, sobre todo en el mundo del nautismo. Una respuesta a este teórico dilema es ser conscientes de que el consumidor tiene voz además de dinero.